“La nada es la absoluta ausencia de la
realidad, incluso del vacío. El vacío existe si y solo si existe una realidad”
Víctor Manuel Alarcón
“El
Universo es un fantasma de corazón, un holograma gigante espléndidamente
detallado”
David Bohm
Hacia una realidad
Resulta complicado intentar escribir sobre Lo Real, desde la postura de
creativo, si se desconoce el límite de lo posible. Quizás sea mas claro para los estudiosos de la
ontología. De igual manera, todo lo que construimos en algún momento cruzó la
idea de la realidad.
La realidad está dada por la construcción de una idea. Podremos
discutir incansablemente en búsqueda de la verdad pero ni aún la ciencia ha
establecido leyes mas que conceptos concretos, actualmente científicos modernos
colocan en tela de juicio la existencia de la Realidad Objetiva.
La física moderna estudia hipótesis y teorías que afirman que la materia
no existe, mientras que la cosmología se interesa en investigar los universos y
dimensiones múltiples. Los sociólogos analizan otras realidades. Para los teóricos del arte y para los mismos
realizadores, el análisis de lo Real también ha contribuido al desarrollo del
arte.
La imagen ha sufrido muchos ataques sobre su naturaleza y autenticidad
en el arte. La imagen virtual, la síntesis, la interpretación, la fotografía,
el holograma… Son vías en la que se afirma de una u otra manera la realidad.
Según la intención. Pero comprenderlo en esencia implica diferenciar entre lo
que es la imagen y lo que es la realidad.
Las imágenes son representaciones codificadas de realidades externas a
ellas, pueden producirse por la configuración física del ente, percibidas por
la visión y reconfigurándose por el individuo. También existen las imágenes
mentales o generadas en un espacio de representación intangible. Afirma Silo,
basándose en el Acertijo de la percepción de Buda que la ubicación del objeto
mental en el espacio de representación se modifica dependiendo de las
operaciones mentales. La realidad quizás se encuentra no en el objeto sino en
el espacio de representación configurado por la percepción. Si se afirma que
los datos de la percepción se modifican de acuerdo con la representación. Entonces
nuestro sistema de representación acomoda el mundo en general de un modo no tan
exacto a como se cree que es la realidad.
Esta afirmación propone otra naturaleza de la imagen, puede confirmar
el pensamiento de Samuel Beckett, sobre la realidad del arte. Beckett sostiene
que el arte y la literatura se sitúan en otra realidad, la que resultó de la
experiencia de la nada circundante, la realidad más verdadera que vive en el
arte, y que se configura por medio de las ideas.
En Ser y Tiempo, Heidegger propone una reflexión acerca de la
existencia de la realidad partiendo de la nada, y sobre la nada. Samuel Beckett
afirma que la realidad en el arte se genera a través de una manifestación
arbitraria entre la existencia y la nada, fruto de la libre voluntad del
artista. Así se crean nuevos universos, nuevas realidades.
Actuamos en función a la construcción de nuestra realidad porque
respondemos a una afirmación. La existencia…
Paolo Herrera
Asunción
Mayo 2012